De arquitectos y proyectos; Bertha Paredes Medina.

 

David Chipperfield. ¿Te suena? Pregunte a un docto amigo que presume estar enterado de todas las noticias locales, nacionales e internacionales.

Su rápida reacción, que me llevo a deducir que lo dijo sin pensar, me hizo divertido el momento cuando dio forma de pregunta a su respuesta: ¿Te refieres acaso al famoso mago de las Vegas?

De inmediato lo saque de su confusión. No, no es el mago. Este personaje a quien me refiero es arquitecto.

Ha!, Por ahí hubieras empezado, me dijo. Pero, aún aclarada su profesión no me suena quien es.

Le señale entonces que Chipperfield es el arquitecto que recién ganó el concurso para edificar la nueva sede de los premios Nobel, en Estocolmo Suecia.

En lo personal, lo confieso, cada año sigo con puntualidad la asignación del Premio Nobel de Literatura porque me sirve de referencia sobre la nueva tendencia literaria en el mundo y hacia donde se orienta la opinión de los jurados respecto a la literatura y los libros.

Por lo anterior estoy al pendiente de lo que se dice o comenta sobre los Nobel y, por supuesto, que no puedo obviar el tema de la construcción de un edificio cuyo proyecto ha sido resumido así: “una apariencia exterior elegante, atemporal y atractiva con una clara identidad propia” La frase, sin duda, es claramente asequible para cualquiera.

Mi amigo, que casi nunca se queda sin algo que decir, me “soltó” la observación que, si de asuntos arquitectónicos se trata, aquí en Campeche la fundación Pablo García, a través de su área de capacitación, acaba de concluir un taller con tema urbanístico que reunió a cerca de 50 profesionales. Su información me supo a aquella vieja sentencia de “que aquí también se cuecen habas”.

Y no lo dudo. De hecho entre mis amistades me precio de contar con el afecto de varios arquitectos que, en su momento han aportado, y siguen contribuyendo, a la proyección del desarrollo urbano de nuestra entidad.

Por mi parte solo puedo decir: ¡Qué bueno que haya interés en promover este tipo de actividades que despiertan en algunos casos y consolidan en otros, el interés y experiencia de hombres y mujeres dedicados a esta rama profesional! Un reconocimiento a quienes se preocupan por replicar el aprendizaje adquirido para que no se quede en pocas mentes. Aprovecho el espacio para felicitar a distinguidos amigos Carlos Domínguez, Dr. En Urbanismo y Antonio Lara, Maestro en Diseño Urbano.

De regreso a mi comentario con que inicie esta colaboración y observando las fotos de la representación simulada en computadora de cómo quedara el nuevo edificio de los premios Nobel no puedo más que decir dos palabras: Será extraordinario¡¡

De los resultados del taller urbano realizado en Campeche en febrero, marzo y abril sé, de buena fuente, hay proyectos de recuperación de espacios públicos en las áreas de Concordia e Imí.

Estaré atenta a ambos sucesos e indudablemente mi bien informado amigo, también lo estará. Por el momento el navega en Wikipendia buscando la biografía de Chipperfield.

Sin fecha de caducidad; Bertha Paredes Medina

 

En las hojas del calendario existen días registrados para todo tipo de celebraciones.

En el personal hay una fecha que no dejo pase desapercibida. El 23 de abril día dedicado a honrar al libro.

Ese pequeño objeto de papel y tinta que en el silencio de sus letras eleva potente su mensaje ante los lectores.

El libro, considero, es el invento más democrático que haya logrado la humanidad para llevar conocimiento, educación y entretenimiento a todos las civilizaciones.

Un libro es un amigo que te invita, desde su primera oración, a acompañarle por el camino colmado de divergentes palabras que, una tras otra, atrapan la atención del lector quien, entonces, no dejará de ir cruzando las diez, cien o novecientas páginas que pueden tener una obra escrita.

Como en esta fecha el objetivo es básicamente la motivación a leer, quisiera compartirles algunas de las más conocidas frases con que inician reconocidos libros. Espero le atinen a todas y midan así su sabiduría literaria. En paralelo, si pueden, anímense a tomar un libro y léanlo.

 

-En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme….

 

-Vine a Comala porque me dijeron aquí vivía mi padre un tal…

 

-Cuando Gregorio Samsa se despertó una mañana después de un sueño

Intranquilo, se encontró sobre su cama convertido…

 

-Todas las familias dichosas se parecen, pero las infelices lo son cada una a su manera…

 

-Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía habría de recordar…

 

-En el siglo XVIII vivió en Francia uno de los hombres más geniales y abominables de una época en que… 

 

¿Adivinaron más de una? Bueno, lo interesante es que enfatizar que las primeras frases son básicas para atraer al lector  e invitarlo a adentrarse en la historia.

Las frases arriba enumeradas son solo un pequeño ejemplo de todas las sorpresas que una se encuentra en su cotidiana aventura con los libros.

Los libros siempre tienen algo que decir. Depende de nosotr@s si queremos saber cuál es el mensaje que nos tiene preparado. Porque, recuérdese, el mismo libro siempre es diferente a la compresión de cualquier lector.

Yo creo que la mejor manera de honrar al libro es leyendo. Si es este 23 de abril que bueno. En todo caso, ténganse presente que ningún libro tiene fecha de caducidad… y el interés humano por la lectura, tampoco.

85 Años de Gabriel García Márquez. In memorian. Bertha Paredes Medina

Confieso que mi alma es de una sensibilidad que se acongoja ante la infausta noticia de la partida de este mundo del gran GABO, este gran literato, escritor humanista deja su indeleble huella a mi generación que con avidez abrevamos de su talentosa obra…Quizá por este motivo me siento con la obligación de retomar y compartirles nuevamente este breve homenaje a su trayectoria que le dedique con modestia, pero con profunda admiración a Gabriel García Márquez…Un adiós y un hasta pronto al maestro.

 

Hay una frase de Gabriel Garcia Márquez que no tiene desperdicio: “La vida no es sino una continua sucesión de oportunidades para sobrevivir”.

Nada más oportuno, justo ahora, que el escritor cumple 85 años.

Me parece que, como otros grandes literatos, él es la prueba viviente de que la perseverancia, y por supuesto el talento, es lo que mantiene el éxito de quien se dedica a lo que define como el oficio más agradable del mundo.

Escribir es una tarea que requiere dedicación y paciencia para hacer bien las cosas y, ciertamente, es algo muy agradable.

Bien sabemos que cualquiera es capaz de sentarse frente al ordenador y pergeñar palabras y frases, puede que con cierta lógica y coherencia pero esto no hace al escritor.

Como en el caso del Gabo se requiera perseverancia. Tener por tarea escribir todos los días. Imaginar mundos, escenarios y personajes que van tomando forma y vida en la mente del escribidor. Y, Solo con la práctica, y el paso de los años, se consigue el oficio.

En la década de los sesenta Garcia Márquez escribió dos de sus obras fundamentales: “El coronel no tiene quien le escriba” y la que es considerada su obra maestra “Cien años de soledad”. No se puede entender su obra sin haber leído este par de novelas.

En los setentas publicó “El otoño del patriarca”, “La increíble historia de la cándida Eréndira y de su abuela desalmada”.

Ya en los ochentas escribe y da a conocer otras dos magnificas obras: “Crónica de una muerte anunciada” y “El amor en los tiempos de cólera” También fue reconocida su labor literaria obteniendo el Premio Nobel de Literatura.

En la década de los noventas público; “Doce cuentos peregrinos”, “Del amor y otros demonios” y “Noticia de un secuestro”.

En la década del dos mil publica una novela que resulto ser una especie de autobiografía: “Vivir para contarla” y el ultimo de sus grandes éxitos que puso por nombre “Memoria de mis putas tristes”. Aquí un breve paréntesis para comentar que el libro dio lugar a la filmación de una película homónima, basada en su texto, que se grabo en escenarios del estado de Campeche.

No exagero cuando expreso que “La vida no es sino una continúa sucesión de oportunidades para sobrevivir”, viene como anillo al dedo para describir la perenne vigencia del Gabo en el universo de las letras hispanas. Formidable escritor que es, ha sobrevivido a públicos y lectores de distintas épocas manteniendo su gran imaginación y talento que lo preserva hoy en día como una leyenda viviente.

En medio de esta alegría de volver a repasar sus mejores novelas de envidiable carrera literaria y celebrar su aniversario de vida numero ochenta y cinco, no se puede dejar de lamentar la trascendida noticia de que sufre algún tipo de enfermedad que le afecta volver a escribir.

Sin embargo, más allá del pesar, me parece justo y necesario brindarle un gran aplauso y reconocerlo como uno de los grandiosos autores que han enriquecido los campos de la literatura mundial. Y, sin duda alguna, se ha ganado, con bastante merito, un lugar especial entre las generaciones de escritores que aprovecharon su vida y la continua sucesión de oportunidades para legarle al mundo lo mejor de su don de escribir.

Solo me resta una pregunta ¿El Coronel ya no tiene quien le escriba?

Reencuentro y costumbres; Bertha Paredes Medina

Dicen que a todo se acostumbra uno y como seres humanos, sin duda alguna,  somos afectos a las costumbres. Nos acostumbramos casi a todo.

Sin embargo, en no pocas ocasiones, el sentimiento de nostalgia invade nuestras almas recordando épocas pasadas que tanto influyeron en nuestras vidas actuales.

Una de esas épocas fue el tiempo de formación profesional que tuvimos en las aulas escolares de la universidad de Campeche.

Por ello, quien tuvo la brillante idea de reunirnos a los que fuimos pioneros de la carrera de Ciencias Políticas, inicialmente de modo virtual vía redes sociales y luego en presencia física, seguro nunca pondero la posibilidad de algunos de no querer dejar atrás la costumbre de estar alejados aunque vivamos en la misma ciudad.

Ese era el riesgo que, por fortuna, no se concreto y todos los convocados respondimos a la convocatoria de reunirnos de nuevo.

La primera reunión fue como de exploración. De medirse, uno a uno y una a una, para analizar cuanto fuimos cambiando con los años. De afectivo reencuentro que produjo rostros iluminados, cálidas sonrisas y efusivos abrazos.

Al final, como hijos e hijas prodigas que regresan a su origen, el sentimiento de nostalgia fue superado por la alegría, y emoción de regresar el tiempo, para reencontrarnos los unos con los otros y reconocernos como buenos amigos.

Quizá por ello, la nueva reunión convocada con motivo del onomástico de uno de nuestros compañeros, que ha llevado a lo más alto su carrera política y administrativa, fue ampliamente cálida.

Ahora hubo mayor soltura y volvimos a disfrutar la charla, las anécdotas, las ocurrencias y hasta las bromas de los compañer@s que mantienen su espíritu agradable y divertido.

Tras amena platica, aderezada con varias tazas de café y el rico desayuno, llego el momento de las tradicionales mañanitas, el pastel, los regalos,  las felicitaciones y los infaltables buenos deseos.

Y, claramente, me pareció que por un momento regresamos

a ser aquel grupo de jóvenes estudiantes que estábamos preocupados por 5 cosas básicas en nuestro futuro: estudiar, terminar la carrera, obtener un buen trabajo, arrimar el hombro al desarrollo de nuestra entidad y consolidar nuestras familias.

Al mirar en retrospectiva creo que lo hemos logrado. También, creo que estamos en vías de acostumbrarnos a repetir, las veces que sean necesarias este tipo de reencuentros, que revitalizan nuestro ánimo.

Lo dicho: A todo se acostumbra uno.

Un saludo a todos los integrantes de la primera generación de Ciencias Políticas y Administración Pública, y aclaro que para no abusar del espacio, que amablemente me concede Tribuna de Campeche y su amable director Lic. Jorge Gonzalez Valdez,  no enumero los nombres de tod@s.

Pero sépanlo bien: Están en mi más apreciado afecto.

Ha, por cierto, felicidades mil, hasta Gobernación, al cumpleañero.

 

Mejores diputados; Bertha Paredes Medina

En estas mismas páginas lo he señalado y hoy lo reitero: Una imagen dice más que mil palabras.

 Y, la foto que publicó Tribuna, muestra una mezcla de sentimientos y humanismo que no se ve frecuentemente. Una mirada dulce de agradecimiento y esperanza de un infante que, literalmente, lucha por su vida y ahora posee un caro instrumento especializado que lo ayudara a sobrellevar su enfermedad.

Frente a él, un conocido legislador campechano que lo observa complacido del bien que aporta a la calidad de vida del menor y que denota sincero interés en la necesidad de la familia solicitante del apoyo.

Ciertamente los legisladores están para hacer o mejorar leyes pero igual, de cuando en cuando, tienen oportunidad de dar su tiempo, atención y ayuda en general a quien lo necesite.

Es el caso del diputado Alejandro Moreno Cárdenas quien, desde los diversos encargos públicos que ha tenido en su fructífera trayectoria política,  se ha dado a la tarea de acercarse a la gente, escucharla y en la medida de sus posibilidades resolverles algunos problemas.

Sin duda, eso es lo que se espera.  Y, a pesar de las distintas historias que conocemos de legisladores que “pasan de noche”,  por el congreso federal, este diputado da vigencia a la antigua sentencia de “cuando se quiere se puede”.

Y no es todo. Un par de días después leemos, también en Tribuna que Moreno Cárdenas gestiono recursos por 18 millones de pesos que serán usados en trabajos de pavimentación en los distintos ayuntamientos de la entidad.  Este esfuerzo, no es un hecho aislado puesto que se suma a los recursos estatales y federales que se destinan para este rubro de tener vías de comunicación en condiciones óptimas.

Ambas noticias, por supuesto, son del conocimiento ciudadano y habrá quien diga que es parte de su trabajo como legislador y obviamente les damos la razón.

Sin embargo, tenemos que considerar que lograr traer recursos a la entidad no es tarea sencilla porque cada uno de los 500 diputados del Congreso Federal busca llevar lo mismo a sus estados.

Se entiende que, justamente al interior de la Cámara, es donde  demuestra su dinamismo, capacidades de cabildeo y negociación para tener buenos resultados en beneficio del estado.

Ahora bien, lo que me animo escribir este comentario es el reconocimiento que recibieron los diputados campechanos Alejandro Moreno Cárdenas y Elvia María Perez Escalante que fueron distinguidos con el premio Tlatoani 2014, en su categoría “Mejores Diputados”.

Este galardón es promovido y entregado por el Instituto Mexicano de Evaluación (IMDE) que reconoce la contribución que ambos diputados por Campeche en el desarrollo del país a través de una buena gestión pública.

Indudablemente lo anterior, demuestra el gran trabajo que los dos vienen desarrollando desde su encomienda legislativa y, bueno, ser premiados a nivel nacional es algo que merece un aplauso porque ponen en alto el nombre de nuestra entidad.

¡Enhorabuena!