Leer es el asunto más democrático que existe. Todos pueden leer. No se requiere ni electricidad ni pilas. Basta el deseo de tomar un libro en manos, abrirlo y deslizar la mirada en cada párrafo de sus páginas. Existen dos rutas cortas a la lectura. Adquirir libros en las librerías o pedirlos en préstamo en las bibliotecas públicas. El asunto es entrar en el maravilloso mundo del saber y conocimiento.
En colaboración anterior, enumere los cinco primos títulos de los diez libros que son mi lista del año que termina. Ahora les detallare la segunda parte. Los otros cinco autores que cautivaron mi escaso tiempo libre con su contribución literaria.
El numero 6 es Alabardas del admirado José Saramago. Un libro que empezó escribiéndolo el propio Saramago y que, después de su muerte, se concluyó con textos de dos escritores versados en su escritura. Al principio, lo confieso, me resistí a adquirirlo. Al ser un libro inconcluso no quería saber cómo sería la mezcla con otras influencias literarias. Pero siendo un tema actual que tiene que ver con la violencia ejercida sobre personas y sociedades, tan comunes en estos días, tuve el impulso de leer lo último que redacto el escritor portugués. Es una reflexión sobre el poder. Como la guerra supera la paz y no al contrario.
Stephen Groz y La Mujer que no quería amar es el título número 7. Interesante narrativa que el New York Times califico como “una combinación de Chejov con Oliver Sacks. Con esta perspectiva tuve que leerlo. Se trata de una historia que muestras el deseo de hablar, comprender y ser comprendido…sin hablar… sino mediante golpecitos a una pared que separa a las personas. Escuchar hasta los silencios que algo significan. 250 páginas de aprendizaje.
El número 8 se titula La larga Marcha de Stephen King el reconocido amo del terror. Este libro, en edición de bolsillo, lo adquirí en una avenida de la ciudad de México. Es un esfuerzo editorial por acercar a la agente la lectura con precio módico. Es valiosa esta edición porque es una obra que King público con seudónimo antes de ser famoso. Un libro calificado como de gran influencia entre los adolescentes. Es la historia de un joven elegido al azar entre millones para participar en una marcha contra 100 competidores en busca de fama y fortuna a cualquier costo. Les dejo un dato adicional: solo el ganador sobrevivirá.
Con el número nueve esta David Foster Wallace y La Niña del pelo raro. A este autor lo descubrí hace unos años y me encanto su estilo complejo. Son 477 páginas que contienen diez relatos que recrean finamente la perturbadora realidad en que vivimos. Después de la lectura de su publicación anterior Entrevista con hombres repulsivos, esta nueva entrega literaria logra que lo increíble parezca comprensible, lo familiar extraño y lo raro normal. En suma, el interés se mantiene de la primera a la última página.
Cierro la lista con el número 10. John Grisham y La Confesión. El género de suspenso moderno no es de mis preferidos pero, como dije, leo casi todo lo que llega a mi mesita de lectura. Este autor es de los más exitosos en su género. La novela explora la pena de muerte. Su lectura es amena y es un viaje entretenido y conmovedor. Por algo tiene un sitio en esta lista de fin de año.
Amigo lector espero que esta lista sirva para animar a leer. Cualquier título cualquier autor, si es de su interés, servirá para lograr este propósito.
Por último, de todo corazón deseo tengan un buen año 2015. Un fraternal saludo.