Campeche y sus pintores en CDMX

carlos

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victor

 

El nombre de Campeche se hace, cada vez más, presente en el medio artístico-cultural de la CDMX. A través de la representación del gobierno del estado se viene impulsando, con éxito, la promoción de la obra de talentos campechanos.

En una ciudad cosmopolita que lo tiene todo, incluso altos niveles de competencia para capturar la atención de público, la fina labor de organización y difusión para mostrar el trabajo de nuestros coterráneos ha logrado que los capitalinos volteen a mirar el arte que se comparte.

Por otra parte, la estrategia convoca a los campechanos radicados en aquella ciudad a acercarse a las exposiciones y disfrutar las producciones pictóricas.

Santa Rosalía 114, Insurgentes San Borja, en la Ciudad de México, es un espacio representativo de la cultura campechana que suma su esfuerzo a la tarea impulsada por el gobernador de presumir Campeche a los ojos de todo el país.

De las últimas actividades relevantes, se destacan la exposición  de un gran campechano cuyo trabajo dejó huella indeleble en la memoria de quienes los conocimos y gozamos el privilegio de su generosa amistad. Carlos Heredia es un referente indiscutible de la pintura costumbrista de nuestro estado que sumó más de 40 años de trayectoria artística. “Costumbres y tradiciones en el sureste mexicano” fue el título de aquella muestra pictórica que mostró su madurez plena como pintor ofreciendo coloridos lienzos que denotaban su amor y alegría por la vida. Una exitosa exposición que llevó, a CDMX, bellas  imágenes de Campeche reflejadas de la naturalidad e ímpetu que Carlos estampaba en sus pinturas.

Otra acertada muestra pictórica que organizó la representación de Campeche en CDMX, fue la dedicada al campechano que pintó los 5 trascendentes y hermosos murales de la Biblioteca Campeche. Uco Cuenca es un pintor cuya obra también es reconocida a nivel nacional y mundial al tener oportunidad de exhibir su obra en varios países de Europa.

Y un tercer acierto de la oficina que representa a Campeche en CDMX fue abrir espacio a uno de los artistas campechanos que vienen consolidando su futuro. Víctor Gómez Esquivel, Vickes, forma parte de la nueva generación de pintores que renuevan la perspectiva artística y asumen riesgos con su trabajo. “Miradas Calizas” se titula su exposición y estará abierta al público hasta el próximo 7 de diciembre. Es decir, todavía hay oportunidad de visitarla.

Víctor dedica gran parte de su obra a Campeche con una serie de piezas que exploran su infancia en esta sureña ciudad donde nació y examina su presente en relación a la identidad y las raíces culturales.

Sin duda, apoyar a nuestros artistas es una forma de ayudarlos en su crecimiento y dar a conocer su obra. Genial idea exponer el trabajo de estos artistas que son orgullo de Campeche y seguir presumiendo lo que somos y hacemos en el ámbito cultural.

Premio Mérito Turístico Campeche

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Tengo especiales recuerdos del barrio de San Francisco en esta ciudad de Campeche. En particular, recuerdo el Circo Teatro Renacimiento y Los Portales; emblemáticos lugares en el mero corazón de este lugar.

Es el primer sitio que me gusta presumir a los amigos que vienen a visitarnos y conocer la ciudad. Luego viene el tour por los demás atractivos históricos y arquitectónicos que ofrece Campeche. Lo hago así, porque en mí aplica aquella frase de José Saramago “Hay que recuperar, mantener y trasmitir la memoria, porque se empieza por el olvido y se termina por la indiferencia”.

De San Francisco son un buen número de mis amistades de toda la vida. De ahí evocan recuerdos que afianzan mi amor por Campeche y que ayudaron a forjar mi vida y carácter.

Por esta razón, una noticia ha provocado alegría y emoción en mi corazón: la entrega del Premio al Mérito Turístico a un san francisqueño luchador, incansable, trabajador pero, sobre todo, leal amigo. Jorge Valentín Medina Aceves, el forjador del famoso restaurante de antojitos campechanos ubicado en el barrio  y denominado Los Portales de San Francisco.

Una historia de perseverancia a lo largo de los años. De insistir y nunca declinar ante un sueño de vida que inicio modesto y hoy es negocio floreciente. Una prueba de que, cuando se quiere, se puede. La de Valentín es una vida dedicada a servir y agradar el paladar de los demás. Que ha costado dedicación, paciencia y tiempo para cosechar sus frutos.

Por ello, el reconocimiento que el gobernador de Campeche Alejandro Moreno Cárdenas hizo entrega a Jorge Valentín, es bien merecido. No solo porque Los Portales sea un famoso restaurante que todo mundo quiere visitar sino porque es la clásica representación de la hospitalidad y bonhomía de un sitio campechano que te hace sentir en casa.

El Premio Mérito Turístico que promueve el gobierno del estado es una forma de seguir estimulando al empresario o al campechano que se dedica a trabajar por Campeche y aportar al propósito de dar a conocer y presumir al mundo quienes somos y porque deben visitarnos.

Un círculo virtuoso en el que todos estamos comprometidos porque al irle bien a Campeche nos debe ir bien a todos. No es una apuesta, es un compromiso de lealtad con el estado que queremos siga creciendo y en desarrollo. Aplaudir el triunfo de los campechanos emprendedores y entusiastas. Seguir dejando en el olvido la antigua práctica del cubo de cangrejos. Apoyarnos unos a otros debe ser filosofía de vida.

En palabras del gobernador Moreno Cárdenas: “Es una prioridad de este gobierno seguir impulsando el turismo, por ello trabajamos día con día para posicionar al estado a lo más alto”

Y de las palabras a los hechos, la presentación del Programa Viajemos Todos por Campeche forma parte de esa estrategia bien definida para seguir consolidando a nuestra entidad como el mejor destino turístico del mundo. No tenemos porqué ser menos.

Campeche en la piel.

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Con la licencia literaria, que nos es permitida a los que escribimos para el público, tomo y respetuosamente parafraseo una hermosa frase contenida en las páginas del libro El laberinto de la soledad del gran escritor mexicano Octavio Paz.

“El campechano no es solamente fruto de la historia y de las fuerzas que la mueven… El campechano, me parece, no está en la historia: es historia”

Magnifica frase que me inspira a compartirles los sentimientos despertados en mí, al participar en la caminata para celebrar nuestra campechanía en el marco de la emocionante fiesta del palmar y el sarao.

Sentir el innegable orgullo de portar, con dignidad y garbo, el colorido y delicado ropaje que nos identifica como campechanas. Caminar por las históricas calles de esta ciudad, partiendo desde la Puerta de Tierra hasta terminar en la Puerta de Mar, juntas, cientos de mujeres evocando nuestra historia y el legado cultural de nuestros antepasados. Es una sensación de tener y llevar en la piel ese sentimiento llamado Campeche.

Emocionarse por la confluencia, en este tiempo, de memorables hechos que forman parte de nuestro desarrollo social y cultural. Campeche celebrando 477 años de su fundación y conmemorando el V Centenario del Encuentro de Dos Culturales. Campeche como un baúl destapado de grandes recuerdos que ilumina el presente y nos recuerda que estamos hechos de histórica grandeza. El Campeche de hoy, sin espacio de duda, esta cimentado en el Campeche del ayer.

Una ocasión que, alegremente, hermana a los 11 municipios en que se divide la entidad. De norte a sur y de este a oeste, campechanos que se vuelven un solo espíritu y alcanzan en la Plaza de la Republica el punto de reunión donde culmina la caminata y detonan las máximas alegrías y despiertan los acordes musicales de lo mejor de los sones campechanos. De nuevo, enchinarse la piel se torna acto reiterativo. La fiesta del palmar y el sarao es parte de nuestra identidad cultural. Una convivencia festiva que democratiza estratos sociales.

Niñas, jóvenes y mujeres de todas las edades, paso a paso, codo a codo, con el rostro iluminado de emociones, cumpliendo el recorrido y celebrando a Campeche, todas iguales, todas campechanas que aman profundamente la tierra que les vio nacer o brindó arropo a quien vino de otros lares.

Y entre el mar de mujeres ahí reunidas, se destaca a una campechana que con finura y con orgullo porta, a plenitud, el traje típico de Campeche, la Lic. Christelle Castañon de Moreno que igualmente emocionada vive las tradiciones.

Termino este emotivo comentario con otra frase de Octavio Paz que refleja, letra a letra, lo que fuimos, lo que somos y lo que seremos: “La memoria no es lo que recordamos, sino lo que nos recuerda. La memoria es un presente que nunca acaba de pasar”. Campeche es el presente que nunca acaba de pasar.

 

 

Presidenciables

Jorge-Castañeda

 

Si tuviera oportunidad de coincidir, de nuevo, con Jorge Castañeda en el restaurante La Única en la CDMX no perdería la oportunidad de preguntarle ¿Por qué te retiraste de la carrera hacia la presidencia?

Y no es que no haya explicado sus motivaciones para tomar esa decisión, pero después de leer las 672 páginas de su libro autobiográfico Amarres Perros es indudable que  haya habido una motivación de mayor trascendencia. Al menos es que deduzco de sus propias palabras, sueños, trayectoria y actividad política que tan detalladamente narra en su libro.

Recuerdo que hace, más o menos, dos años visito la Universidad Autónoma de Campeche para promocionar justamente ese libro. De su charla, me parece quedaron claras un par de cosas. Uno, más allá de promoción literaria, andaba en franca gira para “mostrar musculo” de su trayectoria y capacidad política y, dos, aquí quedo constancia de que aspiraba a ser presidenciable. En particular, porque en 2018 quedo abierta la puerta para una de sus luchas personales: la candidatura ciudadana; Él fue precursor de esta tipo de apertura política.

En aquella ocasión me firmo un ejemplar de su libro con una dedicatoria que me refrendo lo inteligente que es como escritor y persona. El tiempo transcurrió; Supe que continúo con sus giras por estados y universidades del país; Hasta que dijo no buscaría ser candidato.

Se me vino a la mente esta interrogante ahora que, a pocos días del temblor en México, los actores políticos que buscan la candidatura presidencial retomaron, como si nada, sus dimes y diretes; dramas partidistas y shows mediáticos en el afán de conseguir su nombre en las boletas electorales. Aun no se terminan de llorar a los muertos ni se reconstruye lo dañado pero, a paso veloz, se abren rumbo al proceso electoral. ¿Triste, oportunista o normal? No sé, usted decida el calificativo.

Algo parecido sucede con los apurados aspirantes a las candidaturas independientes. Tienen fecha para manifestar, mediante carta, sus intenciones de contender por la presidencia. Varios ya desfilaron por la oficina electoral nacional. Ellos y ellas que, sin partido, van  buscando “vivir la experiencia”.

Junto con pegado viene la altisonante situación de los partidos políticos nacionales de “donar” recursos públicos que reciben a las labores de reconstrucción de lo afectado por los terremotos. Mucho ruido y pocas nueces que el árbitro electoral intento cooptar aunque finalmente, al parecer, fue aprobada la entrega de los recursos partidistas a las labores de ayuda sin que quede bien claro cómo y en que se aplicara.

El tema de recursos para reconstruir daños estructurales y habitacionales a causa de los sismos tiene una vertiente que no se puede eludir. El millonario recurso donado, desde el extranjero, por artistas, instituciones y gobiernos hermanados con nuestro país. A ello, súmele lo donado por los mismos personajes pero connacionales. Sin duda, se trata de una enorme cantidad de dinero que debe servir para levantar lo caído en bienes particulares y ayudar, a quien lo necesite, a recuperar su vida y patrimonio familiar.

La pregunta que viene irremediable es quien va vigilar la correcta aplicación de los recursos y, por supuesto, la rendición de cuentas. Si la política tiene prisa también la necesidad social la tiene. ¿O como imaginan la escena de un presidenciable pidiendo el voto a quien perdió bienes en los sismos y todavía no tenga casa?